Celebrando el 4 de julio
Una de mis nuevas metas es celebrar las fechas festivas más importantes. El 4 de julio pasado todavía Tazio era prácticamente un bebé, así que lo único que hicimos fue pasar el día en la piscina y comer un montón de estrellas de melón. Este año fue diferente, empecé a hablarle de la fecha que celebraríamos días antes y estaba realmente entusiasmado cada vez que veía alguna bandera.
Cuando creces en Cuba, un país donde ni siquiera existía el derecho al voto, te cambia la perspectiva a la hora de valorar libertades que a veces se toman como algo natural, pero para muchas personas ¡son un sueño! Yo estaré siempre agradecida a México y Estados Unidos por permitirme hacer de ellos mi hogar y estoy feliz de poder celebrar sus fechas patrias.
En fin, nuestro plan era ir a casa de la familia de Jaime y pasar allí la tarde. La casa da a un lago y es muy agradable meterse al agua para refrescar del calor del verano de Miami. Ya Tazio había tenido aquí su primera experiencia en jet sky. Esta vez dimos un paseo alrededor del lago en bote y Tazio vio a su papá practicando wakeboarding. Al principio estaba un poco ansioso, pero luego comenzó a divertirse muchísimo y se moría de risa cuando Jaime se caía al agua y teníamos que ‘rescatarlo’.
Otros ‘first’ para Tazio fueron comer mazorca de maíz recién salida de la parrilla y por supuesto, ver los fuegos artificiales que ¡le encantaron! Me hubiera gustado llevarlo a un show mayor, pero creo que al final fue mejor así, para que se acostumbre a ellos poco a poco. Aunque fue una tarde tranquila, él llegó ondeando su bandera chiquita y siento que de alguna manera sabía que todo estaba relacionado con esas estrellas y barras que tanto le gustan.
Para el próximo año quiero preparar alguna receta especial o algún postre con los colores de la bandera. Ya veremos…
Espero que todos hayan tenido una semana fabulosa y que estén empezando esta con mucha felicidad y energía. Quiero comenzar a postear más sobre nuestras actividades en Miami y nuestro lifestyle regular, así que ¡no se pierdan!
Love,
Odette